Otro de los aspectos básicos para alcanzar el mayor confort en nuestra vivienda es contar con un buen Aislamiento Acústico de ruidos que provengan del exterior. No sólo es cuestión de conservar la tranquilidad e intimidad adecuada en nuestro hogar sino mantener la salud física y psíquica de toda la familia.
El aislamiento acústico se utiliza fundamentalmente en paredes y techos que separan las habitaciones de las casas de vecinos o del exterior.
Al igual que con aislamiento térmico hay que hacer un estudio previo para conocer la naturaleza y origen de los ruidos que queremos aislar. Ruidos aéreos (que se propagan por el aire) provenientes del exterior (tráfico rodado o aéreo, bares, obras,...) o de casas vecinas; y ruidos de impacto (golpes) sobre las distintas estructuras de nuestra casa (techos, paredes,…)
Una cuestión a tener en cuenta es que gracias a la similitud de los materiales utilizados en el aislamiento térmico y acústico ambos van a complementarse cubriendo ambas facetas en la misma obra.